Belleza natural, café, cordialidad, 858 veredas que nutren una región reina del turismo natural Colombiano, esto es el Quindío. El departamento cuenta con una posición geográfica inigualable y esto hace que recorramos sus rutas fácilmente para una estadía placentera. Su extensión es de
207.000 hectáreas envueltas en naturaleza encantadora, en paisajes exóticos y un clima agradable para propios y visitantes.
En esta tierra se guarda uno de los tesoros más representativos de Colombia, su árbol nacional, la majestuosa, milenaria y fascinante palma de cera, rodeada de una fauna única, entre aves y osos de anteojos, sublimes seres que viven entre dulces fragancias. El Quindío es la combinación del esfuerzo humano, familiar y generacional de los caficultores con el acompañamiento permanente de las instituciones. Definitivamente, la región es un excelente destino turístico para vivir experiencias mágicas.
Córdoba es uno de los municipios más recientes del Quindío, fue fundado en 1912. Sus primeros pobladores fueron campesinos que huyendo de la guerra de los mil días se desplazaron desde Antioquia a Risaralda y luego hacia la región de Rio Verde, lugar escogido para el establecimiento de este municipio cordillerano. Desde lo alto de una colina sembrada de café, Buenavista ofrece una posición privilegiada para admirar la belleza escénica del Paisaje Cultural Cafetero; su nombre podría parecer redundante para la población con la panorámica más espectacular de todo el departamento. Pijao forma parte de un movimiento llamado ciudades sin prisa, esta red internacional promueve modelos de turismo sostenible, de calidad y a pequeña escala enfocados a conservar los entornos naturales y culturales. En palabras de sus habitantes, Pijao es un pueblo en donde “se vive sabroso”. Cualidad que le concede un particular encanto para los viajeros que buscan destinos que se caractericen por su autenticidad y serenidad.
El itinerario es una aventura en horas de la tarde en Jeep Willys, vehículo típico de la región, con recorrido por lugares como Cordoba, el encantador pueblo de Pijao y Buenavista para deleitarse con el café más premiado de Colombia. Al finalizar la tarde acomodación en el hotel.
Filandia es un municipio con una notable riqueza de tipo natural, paisajística, arquitectónica e histórica. La amabilidad de sus habitantes y su particular encanto hacen de este hermoso pueblo uno de los lugares turísticos preferidos en el departamento. A diferencia de otros destinos más congestionados, Filandia se caracteriza por su tranquilidad y autenticidad. Salento es el municipio más antiguo del Quindío. Fundado en 1842, sirvió como punto de partida para las avanzadas de colonizadores antioqueños que poblaron la región del Quindío durante la segunda mitad del siglo
XIX. Salento inició en el ahora corregimiento de Boquía como una colonia penal establecida por el gobierno del Cauca para hacer mantenimiento al Camino del Quindío.
El recorrido empieza por el pueblo de Filandia, con una visita panorámica por sus lindas casas de colores y tiendas de artesanías locales que adornan las calles de este municipio. Continuación hacia el Valle del Cocora para apreciar sus bellos paisajes y la majestuosidad de las palmas de cera, árbol nacional de Colombia. Almuerzo en un restaurante típico y continuación hacia el pueblo de Salento para recorrer la Calle Real y tener tiempo a disposición para disfrutar un café en una de las cafeterías del pueblo antes de regresar al hotel al finalizar la tarde.
Nuestro tour gastronómico es una experiencia culinaria en una finca biodiversa del Paisaje Cultural Cafetero. Aprenderemos recetas típicas de Colombia y conoceremos diferentes tipos de árboles frutales y las flores que hacen único al Paisaje Cultural Cafetero. Este es un recorrido auténtico por uno de los rasgos más importantes de una cultura: su gastronomía. Las recetas no son solo los famosos platos “típicos” de la región, sino lo que en realidad se consume en los hogares colombianos, representación de la localidad.
Traslado privado a una finca tradicional cerca al municipio de Quimbaya. Iniciamos conociendo a un miembro de la familia y conocedor de la flora de la región. Para empezar con energía vamos a preparar un desayuno a base de chocolate colombiano y el plato insignia de la región: arepa de maíz con queso. Luego vemos una muestra de la variedad de frutas, granos, verduras y semillas que se producen en la zona, degustando algunas y seleccionando otras para preparar la base de nuestro almuerzo. En la cocina adelantamos un poco la preparación de almuerzo que puede variar según las necesidades del cliente y los ingredientes de la temporada. Salimos a recolectar otras verduras de la huerta, frutas por la finca y huevos en la finca vecina, para regresar a terminar nuestra preparación con los demás ingredientes. Cuando la comida está lista nos sentamos en la mesa a disfrutar de nuestra preparación. Para terminar como es debido haremos un café producido en la finca y haremos un recorrido por los cafetales para conocer el proceso desde la semilla hasta la taza.
Hacienda Bambusa es una plantación trabajada, consta de 180 y más hectáreas cultivadas mayormente por cacao. Junto a tu guía, disfruta de dos horas de caminata por el alrededor de la propiedad. Se realizará una observación de aves por el camino.
Duración: 2 horas.
Hospedarse en Bambusa es sumergirse en una gran hacienda que esconde una casa construida de bambú y arcilla, conservando el estilo arquitectónico tradicional de la región cafetera colombiana. Rodeada por las enormes montañas que conforman la cordillera de los Andes centrales, árboles centenarios, jardines y granjas; se transforma en un oasis de paz y belleza natural. La casa fue adaptada hace seis años para recibir a sus huéspedes y se ha consolidado como el destino ideal para los viajeros internacionales en el área del Quindío. Hacienda Bambusa cuenta con 8 habitaciones. Hacienda Bambusa ofrece el escenario perfecto para relajarse en un pequeño oasis bajo la sombra de un samán antiguo que nos abraza con su sombra. Hacer un alto en medio de un viaje, reducir la marcha, darle un respiro a nuestro cuerpo: Consentirlo.
La propuesta del chef y su equipo rescata el carácter e identidad cultural de cada una de las regiones de nuestro país. Utilizando técnicas contemporáneas, cada uno de los momentos ofrecidos en el menú de la noche, ofrecen una variedad de aromas y sabores, un viaje gastronómico a través de nuestro país.